La nueva caja para sensores IoT BoLink se fabrica en policarbonato difícilmente inflamable y autoextinguible en ejecución UL 94 V-0. Sus dimensiones son muy compactas: 70 mm de longitud y 42 mm de anchura. En la caja es posible integrar un sensor, un módulo de radiotransmisión y la alimentación eléctrica. Gracias a la sujeción conformada para la integración de un elemento de compensación de presión es idónea también para el uso en exteriores. En función de la potencia de transmisión requerida en el elemento de radiotransmisión es posible encargar la caja de plástico de BOPLA en tres alturas diferentes: 15 mm para una pila de botón, 22 mm para tres pilas AAA y 26 mm para una batería de litio CR 14250.
«Los sensores son componentes extremadamente individuales. Si bien es cierto que deben fabricarse en cifras muy elevadas, la aplicación en los productos de cada cliente es siempre específica. Por ese motivo, hemos desarrollado para BoLink un concepto modular de matrices para la producción», explica Mathias Bünte, gestor responsable de producto en Bopla Gehäuse Systeme GmbH. Utilizando una matriz básica y distintos insertos para la conformación de diversas alturas de la caja, estribos para montaje mural y atornilladuras es posible fabricar en total 18 variantes diferentes a partir del modelo básico IoT. Para cada altura se ofrecen tres ejecuciones diferentes:
- con sujeción mural y acceso por delante para un cambio confortable de la batería
- con sujeción mural y atornilladura por detrás para asegurar un acabado homogéneo
- con atornilladura por detrás y sin estribos para montaje mural
Al mismo tiempo es posible elegir entre dos grados de protección IP para cada caja para sensores IoT BoLink: sin junta IP 40, con junta IP 65. En caso necesario es posible utilizar la junta para aumentar en 1,5 mm la altura de montaje en el espacio para equipos electrónicos.
